En ese contexto de permanente y necesaria búsqueda de nuevas fuentes de metales –y para las necesidades del país en general, no sólo para las de acuñación- podríamos enmarcar la expeditiva Orden Ministerial de 29 de octubre de 1941, firmada por el ministro de Hacienda Joaquín Benjumea, por la que se decidió “retirar la moneda fraccionaria de bronce acuñada con arreglo al Decreto de 19 de octubre de 1868 (…) quedarán sin valor libratorio, no admitiéndose en las cajas públicas ni entre particulares, quedando prohibida su circulación y tenencia…”. En el inicio de la sustitución del bronce, se había aprobado un año antes la fabricación y puesta en circulación de nuevas monedas de aluminio de 10 y 5 céntimos. En preámbulo de la Ley firmada por Franco el 3 de mayo de 1940, se proclamaba -en todo un alarde retórico- que se efectuaba para remediar el “enrarecimiento de la moneda fraccionaria que tiene su origen inmediato en el (…) dominio marxista”. El resul-tado fue que el viejo motivo del jinete con lanza de los ases y denarios ibéricos regresaba de nuevo a nuestras monedas galopando en el anverso de estas ligeras piezas, según modelo realizado por el grabador de la FNMT Carlos Mingo.
Aun siendo las nuevas monedas de un reducido valor libratorio, la precaria economía espa-ñola de los años cuarenta y cincuenta dio un gran uso a éstas. Independientemente de la fecha de fabricación que muestren –1940 o 1941- estas nuevas monedas de 5 y 10 céntimos de aluminio, todas ellas fueron puestas en circulación a la vez en 1943, según Orden Ministerial de 16 de enero del mismo año. Esta disposición mandó al mismo tiempo “que sean admitidas en las cajas públicas sin limitación, y entre particulares hasta 5 pesetas, cualquiera que fuera el importe de la transacción”. Las piezas de aluminio del “lancero” heredaron los apodos populares que ya disfrutaban las viejas de bronce de igual facial que vinieron a sustituir, pero no su longevidad; ya que, por una u otra causa, las nuevas monedas tuvieron una vida circulante mucho más corta que aquéllas, ya que la aleación ligera utilizada resultó ser inadecuada: las nuevas perras gordas y chicas se deterioraban o se deshacían muy fácilmente, ya fuera por oxidación o por una escasa resistencia al uso diario; lo cual no impidió que en 1945 y 1953 se repitiera de nuevo su acuñación.
Desde el punto de vista técnico y de rentabilidad de la FNMT, también era muy importante que las aleaciones elegidas permitiesen un elevado ritmo de acuñación sin provocar un excesivo desgaste del utillaje que obligara a reponer los troqueles muy a menudo. En las acuñaciones iniciales se pudo contar con algo de materia prima nacional obtenida entre 1940 y 1942 a través de la Sociedad Anónima de Aluminio Español; pero agotados los escasos recursos internos, el Ministerio de Hacienda autorizó a la FNMT a importar el metal necesario desde otros países, a pesar de encontrarse en plena Segunda Guerra Mundial. Lógicamente, el metal procedió en gran medida de nuestros “amigos” del Eje: de la Sociedad General Montecatini de Milán; de L’Aluminium Français de la Francia ocupada de Vichy; y desde otra empresa suiza. La elaboración de los cospeles en España corrió a cargo de la Sociedad Anónima San Gonzalo, de Linares (Jaén).
Fuente: 1937-2002: PRINCIPIO Y FINAL DE LA PESETA FIDUCIARIA
Dr. D. Rafael Feria. Director General Fundación Real Casa de la Moneda

Aleación: Aluminio 975 milésimas, con tolerancia máxima de 10 por 1.000. Cobre el resto.
Peso 10 céntimos; 1,85 gramos, permiso en feble o fuerte 15 por 1.000.
Canto estriado; El canto de la moneda de 10 Céntimos tiene 36 estrías en relieve.
10 Céntimos 1940 PLUS


10 Céntimos 1940 PLVS


10 Céntimos 1941 PLUS


10 Céntimos 1941 PLVS


Cuño Doblado de Anverso
Fruto del Hincado no coincidente del Punzón de Trabajo, los bajorrelieves del cuño se doblaron. Todas las monedas acuñadas con ese Cuño de Anverso Doblado, presentaran en magnitud y posición, el error (contorno doblado). 10 Céntimos 1940, 1941, 1945 y 1953. La Matriz de Anverso.

Comparación Cuño de Anverso Doblado y Anverso Tipo

El Cuño Doblado de Anverso presenta las características propias de un Cuño Doblado. CUÑO DOBLADO/HINCADO (casi) COINCIDENTE
1) Flechas rojas – contorno/perfil/borde doblado
2) Flechas naranjas – muescas
3) Dobles flechas naranjas – mayor grosor/tamaño relieves moneda
4) Elipses naranjas – menor tamaño huecorrelieves moneda
El Cuño de Reverso
Todas las piezas expuestas, tienen en la cuarta pluma (derecha), en reverso de la moneda, esa traza que señala la flecha roja.

Todas las piezas que vi, la tienen. Es muy obvio, que no vi todas las piezas acuñadas. Pero, no solo las piezas acuñadas con fecha 1940 y 1941, tienen ese aspecto/diseño en la cuarta pluma. También lo tienen los 10 Céntimos acuñados con las fechas de 1945 y 1953. El error puede venir de uno de los procesos anteriores (etapas), a la generación de la Matriz o Matrices. En el punzón de Maquina (altorrelieve), no se podría retocar/arreglar el diseño de la pluma, pero en la Matriz de Reverso, que esta en bajorrelieve, se podría retocar la cuarta pluma. Si el error, se ha producido en una etapa anterior a la elaboración de la matriz, y hubiera mas de una matriz, es raro que el aspecto de la cuarta pluma, no se retocara tampoco en la segunda matriz.
La Matriz de reverso, tiene esa traza/distintivo, y en principio, dicha matriz de reverso genero todos los reversos de los 10 Céntimos con fecha 1940, 1941, 1945 y 1953. Que una matriz presente un distintivo, significa, que todos los cuños que tengan su origen en ella, acuñaran en las monedas, dicho distintivo. La matriz mediante hincado, puede generar mas de un centenar de Punzones de Trabajo. Todos ellos, tendrán ese aspecto/diseño en la cuarta pluma, el cual se reflejara, en principio, en cada cuño obtenido de los punzones de trabajo.


El retoque de U
Algunos troqueles que habían perdido el grabado de la letra U, en la leyenda del escudo «PLUS ULTRA», por defecto de fabricación o desgaste, fueron retocados a mano regrabando la letra V en vez de la U, por razones de simplicidad y rapidez. La Peseta Catalogo Básico Jose Mª Aledón.
El retoque se realiza a buril (manualmente). Pero donde se realiza el grabado de la V?. En el Punzón de Hincar Troqueles o Punzón de Trabajo. 1 Peseta 1947*(19-51). Rectificación E/19. Las estrellas en el proceso de acuñación. Todos los cuños procedentes de un Punzón de Trabajo rectificado/retocado, tendrán dicho retoque.
El retoque manual, se realiza en dos etapas;
1) En el Punzón de Trabajo se graba a mano la V. El Punzón de Trabajo esta en altorrelieve igual que una moneda acuñada de 10 Céntimos. Al igual que la moneda de 10 Céntimos, el Punzón de Trabajo, tiene la leyenda de las cartelas de las columnas en huecorrelieve. Por tanto se puede profundizar en la cartela, quitar metal y así grabar la V.

2) El Cuño obtenido una vez finalizado el proceso de Hincado del Punzón de Trabajo, tendrá en la cartela PLUS de la columna, la U y la V en altorrelieve. El operario que trabaje sobre el cuño, tratara de eliminar la U, raspando/limando el metal. Con la lupa, en las piezas en alta conservación, y que no hayan sufrido desgaste por circulación, en principio, debería verse rastros del trazo de la U.

Enlaces
https://blognumismatico.com/2010/10/28/plus-y-plvs-en-las-monedas-de-franco/